viernes, 9 de noviembre de 2012

Regalar deportivos a quien colecciona Ferraris

Imagen de lainformacion.com


Un artículo de David Aparicio - @Banquilleros

Se repite cada año por estas fechas. Los jugadores del Real Madrid y del F.C.Barcelona, reciben el cochazo de rigor por parte de las casas más prestigiosas del panorama automovilístico. Luego se enfundan el mono de Fernando Alonso o Marc Gene, se suben al auto y alardean de caballos en el Jarama o Montmelo. Los fotógrafos y los cámaras buscan con desespero las mejores instantáneas de los astros al volante. Derrapes, aceleración, frenazos y glamour a borbotones.

Obviamente el mundo de la publicidad funciona así. Si quieres que tu producto esté en el candelabro, acércate al que irradia luz propia. Y en esas estamos. El problema es que la situación actual en España, invita más bien poco a estas demostraciones de exceso desmedido. Quiero decir que regalarle un deportivo a quien colecciona Ferraris parece cuando menos cuestionable. Mucha gente lo está pasando mal, muy mal. Observar como estos iconos mediáticos, con salarios estratosféricos, son premiados con lujos inalcanzables para la mayor parte de los ciudadanos, parece innecesario y tal vez hasta contraproducente en cuanto al fin último de la acción comercial. O quizá yo esté equivocado. A lo mejor este tipo de publicidad sea efectiva y proporcione cuantiosas ventas a los concesionarios. Bajo mi punto de vista no obstante, optar por donar este dinero a quien realmente lo necesita, sería la mejor de las campañas y elevaría la imagen pública de unos y otros.

Nuestra revista on line

wibiya widget