Un artículo de Coral González - @coralgo
Papa Noel adelantó ayer su jornada de reparto de regalos y brindó a los aficionados culés una de las jornadas más intensas y felices de lo que llevamos de 2012. Tanto Xavi, como Puyol y Messi firmaron sendas ampliaciones de contrato que dan continuidad y refuerzan la espina dorsal del equipo.
Los tres líderes del conjunto, a falta de Andrés Iniesta, permanecerán en el club de su vida hasta pasada la treintena. Todos sueñan con colgar las botas en el Barça y el club confirma su intención de que éstos se retiren con los honores que merecen por brindar los mejores años de la historia al equipo, por su compromiso y lealtad.
No hay que echar la vista demasiado atrás para recordar que tanto Puyol como Xavi fueron señalados en su día como alguno de los males del club. El defensa no terminaba de disfrutar de todos los minutos que su inquebrantable ambición buscaba y a punto estuvo de hacer las maletas rumbo a Valladolid. Xavi, tuvo un pie en Milán cuando parecía que el juego de toque no era la vía para volver a la senda de la victoria.
Tres renovaciones que sirven además para golpear en la cara de un maltrecho Real Madrid, que sigue a la espera de que Mou, Cristiano Ronaldo y su tristeza decidan que hacer a partir del próximo junio. La calma del club azulgrana agita aún más las aguas turbulentas en las que últimamente navega a la deriva el club blanco.
Todo esto hubiese sido suficiente para recordar el 18 de diciembre de 2012 como un día importante para el FC Barcelona pero esta información quedó eclipsada por la noticia que la mayoría de culés esperamos desde hace meses. Los médicos del club han dado su OK a la reincorporación de Eric Abidal al trabajo en grupo.
El francés ha superado el cáncer que lo apartó de los terrenos de juego en dos ocasiones y está listo para volver a vestir la elástica azulgrana. Poco a poco y por supuesto colocando siempre por delante su salud, Eric irá recuperando peso dentro de un equipo que ansía el regreso del lateral galo.
La lección de vida que Abidal ha enseñado al mundo del fútbol quedará grabada para siempre en la memoria azulgrana, al igual que su imagen levantando la última orejona. Karim Benzema recibía ayer el galardón al mejor jugador francés del año y el nueve del Real Madrid decidió dedicárselo a Eric Abidal, amigo y ex compañero en el Olympique de Lyon, en un gesto que le honra y que lima más asperezas entre ambas plantillas.
Abidal ya ha ganado el partido más importante de su carrera y al hacerlo nos ha ganado a todos irremediablemente y para siempre. Eric volverá a correr la banda del Camp Nou con el 22 a la espalda y ojalá pueda ser también el encargado de alzar una nueva orejona en Wembley. La continuidad del proyecto está garantizada, y ahora a nosotros sólo nos toca seguir disfrutando de este Barça.
